Historia de la marca Stryd
La historia de Stryd no tiene otro remedio que ser corta e innovadora porque su evolución depende del factor tecnológico en gran medida. Stryd nace en 2015 como una cinta pectoral que medía la potencia generada por el corredor. Un año después, ya aparece el dispositivo que va sujeto a la zapatilla de running, el precursor del potenciómetro para running que conocemos hoy.
Ventajas de entrenar con potenciómetro
Hasta la irrupción de Stryd en el mundo del running, el entrenamiento se medía y planificaba por sensaciones y con las únicas mediciones del ritmo y las pulsaciones. Stryd permitiría por primera vez entrenar por potencia, lo que significa poder realizar un análisis y control del esfuerzo como nunca antes.
Al igual que en el ciclismo la medición de la potencia ha permitido un salto cualitativo en el entrenamiento, para los corredores, Stryd es el primer potenciómetro para running que ha posibilitado la gran evolución en el análisis y medición precisa de la carrera.
El primer potenciómetro para running.
A los datos más comunes como el número y longitud de la zancada, la distancia o la elevación, Stryd aporta dese 2019 el de medir el viento para correr. Cuando corremos incluso con viento cero, hay que atravesar el aire. Si es fácil adivinar cómo afecta esto al corredor, imagina cómo influye el viento corriendo si este actúa a favor o en contra del corredor.
Con el potenciómetro para running Stryd y sus capacidades de medición sin precedentes podremos planificar nuestra estrategia para correr en los entrenamientos. Por esta razón tu estrategia en carrera podrá ser la más efectiva y adecuada para alcanzar tus metas.
Con el potenciómetro Stryd ahora puedes realmente entrenar para una carrera perfecta.